¿Somos poco productivos los chilenos? La reducción de la jornada laboral ha puesto en la mira la productividad de los chilenos. Estudios han indicado que el 90% de las personas considera que “sacar la vuelta” es bueno. Entonces, ¿qué tan productivos somos realmente?
Una pregunta recurrente en el país es cuántas horas debemos trabajar para garantizar estándares de productividad. Una inquietud que toma fuerza tras conocer las cifras de la OCDE que indica que anualmente los chilenos pasan alrededor de 1.974 horas en la oficina, superando con creces a países desarrollados como Alemania, donde sus habitantes trabajan 1.363 horas aproximadamente, pero sus índices de productividad nacional son una de las más bajas a nivel mundial.
Sumado a esto, Chile produce 25.9 dólares ($18 mil) cada 60 minutos, en cambio el promedio de los países OCDE es de 52 dólares ($36 mil) durante mismo período. Entonces, si trabajamos más porque somos uno de los países menos productivos del mundo.
Un estudio de Laborum indicó que el 90,5% de las personas que participaron del sondeo declaran que es fundamental tener un receso de la jornada laboral y que las empresas debieran considerar entregar estas instancias, pues todos necesitan distracción para así ser aún más productivos.
¿Somos poco productivos los chilenos? Esto opinan los expertos
Para los expertos, el concepto de productividad es subjetivo, por ende depende de las capacidades, la efectividad y la forma de trabajo más allá de la cantidad de horas que una persona esté dentro de una oficina. La tendencia de los cowork y las oficinas flexibles han generado múltiples cambios en el contexto laboral, ya que estos lugares ofrecen ambientes de colaboración, inspiración y mejorar la calidad de vida de las personas, lo cual se traduce en mejores indicadores de productividad.
Para el fundador de Launch Coworking, Gonzalo Camiruaga, el efecto cowork ayuda a las empresas y nuevos negocios ayuda a las personas a mejorar la calidad de vida de las personas, ya que permite a sus clientes compartir intereses, inquietudes y conocimientos con otros actores de la industria. “Los trabajadores de una empresa no solo están sentados en un lugar más bonito, sino que son más felices en su trabajo. Y si sacamos la cuenta que pasamos la mayor parte de nuestra vida en el trabajo, estos espacios impactan positivamente en la vida de las personas, y eso se devuelve en que las empresas reciben más productividad e incentivos para sus trabajadores”.